Las barreras del día a día

Para alguien con parálisis cerebral el día a día es muy distinto al de otras personas, ya que es necesario contar con ayuda para realizar actividades tan cotidianas como hacer la cama, peinarse o tener que ir al baño en la propia casa o en algún sitio público, donde te encuentras que no está adaptado ni siquiera para poder entrar.

Desde muy pequeña, he encontrado barreras que me impiden moverme libremente. Muchas veces he querido entrar en algún establecimiento y no he podido, porque no había una rampa para subir con mi silla. Me fastidia que hoy en día algunos sitios no sean accesibles, sobre todo sabiendo que cada vez hay más personas con algún tipo de discapacidad.

Ahora siendo mayor de edad, me he visto en la situación de tener amigas y no poder hacer todo lo que ellas hacen, como ir a una discoteca. El día de mi graduación, por ejemplo, que se supone que es especial para una chica de mi edad, no pude celebrarlo, ya que no estaban adaptadas las instalaciones. Me gustaría que en un futuro esto ya no sucediera.

 Todas las personas tenemos derecho a poder movernos libremente, sin tener que pedir ayuda, y a ser lo más independientes posible dentro de nuestras limitaciones.

 

Lucía Puerta García