Un reto que afrontaremos juntos
Soy Estefanía, madre de dos niñ@s diagnosticados de Síndrome de Asperger. Deciros que ser madre de ell@s me ha aportado mucha felicidad, se quedaría corto; ell@s me han dado la capacidad de valorar cada paso, que cualquier otro padre o madre lo ve normalizados. (la primera vez que mi niña habló, o el primer abrazó que me pidió mi niño…).
La suerte de poder vivir el presente y tener la capacidad de desarrollar habilidades a otro nivel como la paciencia, la empatía, la forma de afrontar las situaciones entendiendo como ven y sienten ell@s el mundo.
Entender e identificar las cosas a las que son sensibles, para evitarlas o exponerlos con control hasta su adaptación (ejemplo el ruido de una moto, o de un avión, pasar cuatro años hasta que conseguimos que confiara en la peluquera, os puedo decir que lloré ese día, o cinco años hasta que lográramos que se cepillara los dientes…
Y lo que es más importante, las capacidades de PARAR. Sí, de parar, en un mundo en el que todo es rápido, en el que todo debe cumplir un ‘patrón típico establecido’ y si te sales de esa dinámica ya estás en el punto de mira de la sociedad y el sistema.
Por eso ha sido, es y será un reto que afrontaremos juntos. Y sí, mis hij@s tienen una discapacidad, al igual que todos tenemos alguna, pero me han hecho darme cuenta de las mías.
Y sabiendo que nadie es igual tenemos que entender que la inclusión es un paso indispensable, muy importante para la educación y para hacer un mundo mejor para todos. Aprovechemos el Día internacional del Síndrome de Asperger para este fin.
Deciros que ell@s me han hecho ser mejor persona.
Estefanía, madre de dos niñ@s
con Síndrome de Asperger